La llama de una vela, como una simple solución al problema del servicio de energía, se incrementó provocando un incendio en una vivienda de Chemesquemena.
Hoy una familia kamkuama está de luto. La conflagración no sólo causó daños materiales sino que se llevó a un pequeño niño que el próximo 20 de octubre cumpliría apenas un añito
El oscuro día asomó su maldad este miércoles 27 de agosto, cuando, en medio de un apagón, la mamá del pequeño encendió una vela cerca de la cama donde dormía con sus hijos
Minutos después, decidió ir a comprar un pañal mientras dejaba a sus dos criaturas de 8 años y 10 meses durmiendo, ya que el bebé tenía problemas estomacales. Lo que jamás imaginó esta señora es que al regresar encontraría la furia del fuego consumiendo su hogar, y causándole quemadoras de segundo y tercer grado al más pequeño.
La escena fue dolorosa. El niño mayor lloraba frente a la vivienda señalando que allá estaba su hermanito- El padre que llegó después, ingresó por él y como pudo lo sacó para trasladaron al puesto de salud en Patillal. Por la gravedad de las heridas, el bebé fue trasladado al Hospital Rosario Pumarejo de López, de Valledupar, donde no fue recibido por no contar con una unidad para quemados y posteriormente remitido a la clínica Médicos, donde falleció la madrugada de este jueves 28.
