Un comerciante del municipio de Curumaní, Cesar, realizó una denuncia a través de un video en vivo publicado en sus redes sociales, en el que acusa a un miembro de la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) de presunta extorsión. Según el comerciante, un uniformado habría pedido $800.000 a su esposa, empleada de su tienda de tecnología y accesorios para celulares, para evitar el decomiso de la mercancía.
En el video, el comerciante expresó su frustración: “Acabo de cerrar el local porque ya estamos mamados, cansados, de que cada que vez que vienen estos señores es a pedirnos plata en efectivo”, señaló visiblemente molesto. El hombre también afirmó que las cámaras de seguridad del local habrían registrado el momento exacto en que supuestamente se solicitó el dinero.
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Por su parte, el policía implicado negó repetidamente la acusación, pidiendo que le mostraran las pruebas que el comerciante asegura tener: “Míreme a la cara y dígame si yo le pedí dinero”, respondió el uniformado. Ante la insistencia del comerciante, el policía se retiró del lugar, alegando que no había pedido dinero en ningún momento.
El comerciante también aprovechó la transmisión en vivo para señalar que en Curumaní operan grupos armados ilegales, pero que, a diferencia de las autoridades como la Polfa y la DIAN, “no les joden la vida”.
Hasta el momento, la Policía Nacional no ha emitido un pronunciamiento oficial sobre el hecho.
