La mañana de este viernes 14 de junio se realizó un plantón a las afueras de la clínica Alta Complejidad de Valledupar, donde un conglomerado de mujeres pedía a los propietarios del centro asistencial que desvinculara laboralmente al médico Antonio Figueredo Moreno, quien fue condenado a 16 años por delitos de violencia intrafamiliar, lesiones personales y acceso carnal violento contra su colega y subalterna María Paula Pizarro, en hechos ocurridos en el departamento de Santander en 2023.
Sin embargo, el propietario de la clínica, Carlos Arce, le dijo a PORTAL ENLACE que esto no pasará, debido a que cree en el buen profesional que es esta persona.
“Yo sigo defendiendo las segundas oportunidades…que tire la primera piedra el que esté libre de pecados. Él lleva 4 días con pacientes graves, ha hecho cirugías de corazón abierto. De no estar él aquí estos pacientes hubieran muerto. Ellos y sus familias pueden dar testimonio”, aseguró el dirigente de salud.
Arce fue más allá explicando que este jueves una persona se había acercado a la clínica, “identificándose como trabajador de la gobernación y pidió ver al Dr. Antonio Figueredo, finalmente le dejó esta nota, el señor es esposo de una paciente, él le hizo cirugía en dos ocasiones en Bucaramanga y quería agradecerle por la vida de la esposa, también le pidió que si la esposa podía saludarlo”.
De acuerdo a sus argumentos, Carlos Arce, insiste en que piensa más en las personas que necesitan al cirujano Antonio Figueredo, que la condena que pesa contra él. Mientras tanto, la familia de la víctima, como otras mujeres rechazan que una persona que haya cometido los delitos mencionados esté ahora en un centro asistencial de Valledupar.
El cirujano bumangués Antonio Figueredo Moreno fue condenado a 16 años de prisión por los delitos de violencia intrafamiliar y acceso carnal violento agravados, en un caso que ha conmocionado a la opinión pública debido a la gravedad de los actos perpetrados contra su expareja sentimental, María Paula Pizarro Higuera.
