La Defensa Civil Colombiana lanzó una alerta ante el riesgo de crecientes súbitas en el departamento del Cesar, producto de la segunda temporada de lluvias. Según la dirección seccional del organismo, las crecientes pueden ocurrir en ríos, arroyos o lagos debido a precipitaciones intensas, deshielo o incluso fallas en represas, lo que podría generar inundaciones peligrosas, arrastrar escombros y poner en riesgo la vida y la propiedad.
“Las crecientes súbitas son eventos impredecibles que pueden presentarse sin previo aviso, aumentando de forma drástica el nivel del agua en muy poco tiempo”, señaló José Zapata, voluntario asesor del Comité Valledupar de la Defensa Civil. Destacó que este tipo de fenómenos requieren especial atención debido a su capacidad destructiva y que los ríos y quebradas que nacen en las estribaciones de la Sierra Nevada y la Serranía del Perijá son especialmente vulnerables a esta situación.
Las principales causas de las crecientes súbitas en la región incluyen lluvias torrenciales, deshielo acelerado por aumentos repentinos de temperatura, obstrucciones en los cauces y, en algunos casos, actividades humanas como la deforestación o la urbanización desmedida, que alteran los flujos naturales de los ríos.
Señales de alerta
La Defensa Civil instó a la población a estar atenta a una serie de señales de alerta que pueden indicar la proximidad de una creciente súbita:
1. Lluvias intensas en un corto periodo de tiempo.
2. Deshielo rápido, que puede elevar el nivel de los ríos de manera repentina.
3. Aumento acelerado del nivel del agua en ríos o arroyos cercanos.
4. Ruidos inusuales de las corrientes de agua.
5. Cambio en el color del agua, que puede tornarse turbia o marrón por la sedimentación.
6. Alertas meteorológicas oficiales, que deben ser seguidas cuidadosamente.
El organismo también compartió una serie de recomendaciones para minimizar los riesgos durante esta temporada de lluvias. Entre ellas, destacaron:
1. Mantenerse informado a través de pronósticos meteorológicos y alertas de inundaciones.
2. Evacuar a tiempo si las autoridades lo solicitan, siguiendo las indicaciones.
3. Conocer rutas seguras y lugares elevados donde refugiarse en caso de emergencia.
4. Preparar un kit de emergencia, con agua, alimentos no perecederos, medicamentos y linternas.
5. Evitar zonas de riesgo, como ríos o áreas propensas a inundaciones.
6. No cruzar aguas altas a pie o en vehículos, ya que pueden ser extremadamente peligrosas.
7. Mantener la calma en situaciones de emergencia para tomar decisiones correctas.
“El peligro está en subestimar la fuerza del agua. Aunque parezca seguro, un nivel de agua de tan solo 30 centímetros puede arrastrar un vehículo, por lo que es vital evitar cruzar zonas inundadas”, advirtió la Defensa Civil.
Para mitigar los riesgos de las crecientes, la Defensa Civil ha implementado varias estrategias de prevención. “Hemos identificado las zonas más vulnerables y establecidos observadores de riesgo en puntos clave,” señalaron desde la dirección seccional, agregando que también que trabajan con las comunidades a través del programa de Planes Familiares de Gestión del Riesgo, que busca educar a las familias sobre cómo actuar ante posibles emergencias.
Además, informó: “realizamos campañas de educación mensuales a través de los principales medios de comunicación para sensibilizar a la población sobre las medidas de prevención”. Finalmente, destacaron la coordinación interinstitucional con otros entes gubernamentales y organizaciones para garantizar una respuesta rápida y eficiente ante cualquier eventualidad.
