Son 2.8 kilómetros de vías que fueron pavimentadas en placa huella en la Sierra Nevada de Santa Marta y une a los corregimientos Guatapurí y Chemesquemena con Atánquez, facilitando un mejor tránsito en la zona.
Esto hace parte del anillo vial en los corregimientos del norte, que comienza en Patillal y culmina en Guatapurí. “Otros beneficios que presta este carreteable, que contó con recursos superiores a $3.660 millones para su ejecución, es el fortalecimiento de la hermandad de las cuatro etnias indígenas con influencia en esta parte de la Sierra Nevada, puesto que contribuye al desarrollo social y ancestral de estas comunidades”, informó en un comunicado de prensa la Gobernación del Cesar, que se encargó de la inversión de esta obra.
Con este proyecto la administración departamental tiene objetivos mejorar el transporte de las comunidades indígenas asentadas en la zona e incentivar el turismo, aprovechando que en ese sector de la Sierra Nevada de Santa Marta es rico en cascadas y es ‘bañado’ por el río Guatapurí. Además, se explotaría de una mejor manera la salida de productos alimenticios que son cultivados, como el plátano, la caña, el aguacate y la yuca, según la Gobernación.
“Por las vías trafica el desarrollo, la competitividad, la salud, la educación y se mejoran las condiciones de vida de los pueblos, son obras que generan bienestar y nuestro compromiso hasta el último día de nuestro gobierno es generar bienestar a los cesarenses”, añadió el gobernador del Cesar, Francisco Ovalle.
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