Esta semana arrancó fuertemente en materia política debido a los movimientos que ha habido en cuanto a uniones y apoyos entre candidatos y candidatas a la Alcaldía de Valledupar y Gobernación del Cesar, a 40 días de las elecciones (domingo 29 de octubre).
La primera noticia fue el anuncio la mañana de este lunes 18 de septiembre de la unión entre la comunicadora Katia Ospino, candidata a la Gobernación del Cesar, y el médico Álvaro Portilla, quien quiere ser alcalde de Valledupar. En un auditorio acompañados de decenas de personas expresaron sus intenciones de llegar hasta el final.
“La lucha anticorrupción no viene de ahora. Estamos proponiendo un nuevo modelo de administración pública, una revolución económica para devolverle al Cesar su verdadera esencia”, manifestó Katia Ospino.
Por su parte, Portilla señaló que la unión con la comunicadora está relacionada con “la libertad política y la honestidad con el pueblo, que es el que manda”. También destacó que tendrán más apoyos políticos y serán anunciados próximamente.
Pasaron menos de 24 horas cuando desde otro extremo político se conoció la consolidación de la unión entre Claudia Margarita Zuleta, que por segunda vez va por la Gobernación del Cesar, y María Isabel Campo, candidata a la Alcaldía de Valledupar.
En la mañana de este martes 19 de septiembre, las dos candidatas expresaron la importancia de estar juntas en la contienda electoral. “Vamos a impulsar a las madres cabeza de familia, vamos a generar políticas de igualdad de género, vamos a proteger a nuestra juventud. Tenemos que trabajar en programas de drogadicción, embarazos en adolescentes, de suicidios, porque los jóvenes son el presente y qué tipo de sociedad estamos construyendo si no cuidamos a nuestros jóvenes”, expresó María Isabel Campo.
La semana pasada Darling Guevara dejó a un lado sus aspiraciones como candidata a la Alcaldía de Valledupar y se unió a Camilo Quiroz y en el marco de la contienda electoral a la Gobernación del Cesar Arturo Calderón decidió adherirse a Claudia Margarita Zuleta a la espera que se pudiera hacer un gran pacto político. Nada está dicho, aún la cosa política sigue moviéndose.