Un juez de conocimiento condenó a 42 años y 6 meses de prisión a Angélica Gil Blanco, la mujer hallada culpable del delito de desaparición forzada agravada, tras demostrarse que fue la última persona con la que estuvo su hijo Jhosuar David Mejia Gil de 5 años antes de desaparecer.
Los hechos se remontan al 12 de mayo de 2024, cuando la mujer llegó en motocicleta al barrio Nuevo Milenio de Valledupar, donde el menor residía con sus abuelos, y se lo llevó sin autorización. De acuerdo con la investigación adelantada por la Fiscalía General de la Nación, la mujer actuó en complicidad con su pareja sentimental, quien la esperaba cerca al terminal de transporte para escapar junto al menor.
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Pese a los requerimientos de las autoridades, la condenada nunca reveló el paradero del niño, dificultando su ubicación y entorpeciendo el proceso de búsqueda.
La captura se llevó a cabo el 21 de junio de 2024 en el municipio de La Paz, Cesar, por parte de agentes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) con apoyo del Ejército Nacional. Desde entonces, la mujer ha permanecido privada de la libertad en la cárcel de Valledupar, donde cumplirá su condena.
Por este mismo caso, Sharol Adriana Arias Martínez, quien sería la compañera sentimental de Angélica Gil Blanco, fue capturada el pasado 20 de mayo en el municipio de La Paz, César por unidades del Gaula de la Policía Nacional y enviada a prisión por decisión de una jueza de control de garantías en Valledupar.
El menor continúa desaparecido, y las autoridades mantienen abierta la investigación para lograr su ubicación.
