En el colegio Ateneo del Rosario estudió su primaria Mariam Muvdi Vega. Pese a que sus padres le ofrecían todo para sus necesidades, ella siempre buscó la forma de ganarse ciertas cosas por sí misma, a través del trabajo.
Por eso, quiso vender stikers, luego en la Sagrada Familia donde cursó su bachillerato, alternaba el colegio con la idea de crear accesorios y bisuterías con el fin de ganarse unos pesos de más.
Sin embargo, llegó el momento en que se dio cuenta que había algo que le gustaba mucho más que eso y era servir a la comunidad.
Además de estudiar administración de empresas y especializarse en alta gerencia, Mariam, veía que se sentía muy realizada cada vez que ayudaba a otros. Fue así como nació también su amor por los animales.
“Hay dos momentos importantes en la vida de un ser humano, una de ellas es cuando uno nace, y la otra es cuando descubre su misión. Así me sentí cuando me di cuenta que la mía es ayudar, por eso me metí a donar en fundaciones, tengo muchas mascotas y ahora a través de la política se que puedo hacer algo por mi comunidad”, dijo la joven.
A sus 28 años aún no puede creer que haya logrado eso que tanto anhelaba desde pequeña. Siempre veía a su padre Gabriel Muvdi Arangüena liderando reuniones, hablando de la política y trabajando por la comunidad. Por eso un día se decidió y le confesó que ella también quería eso para su vida.
“Yo siempre le pregunté a Dios para qué nací, porque sentía que estaba hecha para algo más que lo tradicional, de estudiar y trabajar.
Soy luchadora, disciplinada, todo lo que me propongo lo consigo”, expresó.
Aunque no le fue fácil, Mariam intentó ganarse la confianza de su grupo político para demostrar que además de ser una hermosa mujer, tenía cualidades fuertes para ser candidata al Concejo de Valledupar y estaba dispuesta a trabajar duro por conseguir el objetivo.
“Entonces me puse a leer, estudiar las leyes, mirar las funciones del Concejo. Antes del sí, decidí prepararme hasta que llegara mi oportunidad. Ahora que llegó no quiero soltarla y sé que soy una buena carta para los valduparenses”, manifestó.
La mayor de tres hermanas trazó su mapa de acción y empezó a visitar varios amigos para irse familiarizando con sus tareas. Hasta que llegó el día del ‘Sí’ y desde entonces está más comprometida que nunca.
“Desde que iniciamos la campaña estoy muy feliz, porque logré lo que quería que es hacer este ejercicio. Ver a la gente, escucharla. Sé a la hora que salgo, pero no a la hora que regreso, me gusta el contacto con la comunidad. Algunos me ven simpática, pero quiero que me vean más allá de eso”, contó.
Además de haber trabajado en la Registraduría de Barranquilla, Mariam estuvo en el Instituto Cardiovascular de la Costa y ha laborado de manera independiente, por lo que asegura conoce bien la necesidad de una persona que no tiene un empleo formal.
Lo que busca
Detrás de la sonrisa de la vallenata Mariam Muvi hay una inquebrantable rudeza que saca cuando debe trabajar. Una de sus otras características es la perseverancia. Por eso, está convencida que ocupará una silla en el Concejo de Valledupar.
“Cuando a mí se me mete un tema en la cabeza no me canso hasta hacerlo, las cosas se logran con esfuerzo. Por eso le digo a mi gente que si llego al Concejo velaré por su bienestar. Principalmente le pondré la lupa a los temas relacionados con la seguridad, educación y empleo, que son nuestras principales necesidades”, dijo.
Añadió que hará respetar su condición de ser mujer: “Nosotras somos más fuertes, debemos tener más iniciativas en el sector público. Somos más, y dejaré a mi género en alto”.
Faltan pocos días para las elecciones regionales. El 27 de octubre nuevamente el pueblo tomará la decisión de a quién quieren ver en Gobernación, Alcaldías, Asambleas y Concejos. En Valledupar hay una opción fresca, joven, cómo ella misma lo dice y esa es Mariam Muvdi.
“Haré un control político eficaz. La mujer debe ser la matrona del Concejo. No sólo haré que mi voz se escuche, sino que lideraré esa corporación. Que se preparen los hombres del Concejo porque llegaré pisando fuerte y no me quedaré callada porque a mi me mueve Valledupar”, concluyó.