Pablo Jaramillo, agente especial de la Empresa de Servicios Públicos de Valledupar (Emdupar S.A. E.S.P.), presentó su renuncia tras 20 meses de gestión en los que asegura haber rescatado la entidad de una inminente quiebra. Según explicó, su decisión responde a razones familiares y personales que lo llevan de regreso a Bogotá.
Jaramillo asumió el cargo en un momento crítico para Emdupar, enfrentando deudas millonarias, demandas legales y un atraso en el pago de hasta cuatro quincenas a los trabajadores. “Cuando llegué, la empresa estaba colapsando. Hoy dejamos un flujo de caja positivo de más de 8.000 millones de pesos, las demandas principales han sido atendidas, y además interpusimos una contrademanda de 118.000 millones contra Radián”, afirmó.
Entre los logros destacados de su gestión, Jaramillo subrayó la mejora en el servicio de agua en sectores históricamente afectados, como Villa Miriam, 450 Años, Populandia, y Rafael Escalona, entre otros. También resaltó la adquisición de maquinaria y equipos clave para los operarios, como una retroexcavadora, compresores, herramientas especializadas y la recuperación de dos camiones que estaban inactivos.
“Fue un trabajo técnico y administrativo arduo. Hoy Emdupar está mejor equipada, con un servicio más estable y con recursos para seguir creciendo. Me voy con la satisfacción de haberle devuelto a Valledupar una empresa que estaba al borde del colapso”, expresó Jaramillo.
Su renuncia será efectiva el próximo 30 de noviembre. Mientras tanto, las autoridades deberán designar a su sucesor, quien tendrá el desafío de mantener la estabilidad alcanzada y continuar con las inversiones necesarias para optimizar el servicio.