El Ministerio del Interior, encabezado por Armando Benedetti, vuelve al ojo del huracán tras una denuncia formal que involucra a una de sus funcionarias por el presunto uso indebido de un avión oficial de la Policía Nacional con fines personales.
La señalada es Juliana Guerrero Jiménez, joven de 22 años nacida en Valledupar y criada en Codazzi, Cesar, y actual coordinadora de gabinete de dicha cartera. Según una investigación revelada por Noticias Uno, Guerrero habría utilizado una aeronave oficial los días 19 y 20 de junio en la ruta Bogotá–Valledupar–Bogotá, sin justificación institucional registrada.
La denuncia, ya radicada ante la Procuraduría y la Fiscalía General de la Nación, argumenta que este uso podría constituir un caso de peculado por uso, dado que no se reportó misión oficial ni se entregaron datos del vuelo, como tripulación o manifiesto de pasajeros. Además, se adjuntaron imágenes compartidas en redes sociales en las que la funcionaria aparece en un contexto aparentemente recreativo, acompañada de familiares y amigos.
Guerrero Jiménez respondió a las acusaciones asegurando que su traslado obedeció a “motivos de fuerza mayor” y desmintió que haya sido un viaje de carácter privado. Desde el Ministerio del Interior respaldaron su versión indicando que su presencia en Valledupar correspondía a labores relacionadas con la estrategia de “paz total”, supuestamente ordenadas desde la Presidencia.
A su vez, la Policía Nacional se desmarcó de responsabilidades. En declaraciones a El Tiempo, una fuente institucional explicó que la Policía solo cumple con el chequeo de antecedentes y seguridad, pero la responsabilidad de justificar y documentar el vuelo recae en la entidad solicitante, en este caso, el Ministerio del Interior.
La controversia se agrava porque no es la primera vez que se cuestiona el uso de aeronaves oficiales con fines no claramente institucionales. En mayo, un grupo de influenciadores fue transportado por aire a un evento presidencial en Barranquilla, encendiendo críticas por un presunto despilfarro de recursos públicos.
El presidente Gustavo Petro, en una reciente intervención, defendió a Guerrero Jiménez afirmando que su viaje fue parte de una misión encargada por el ministro para el país. Sin embargo, sus declaraciones también encendieron el debate al desviar la atención hacia otras prácticas cuestionables del sector salud.
Juliana Guerrero, sin estudios profesionales culminados, ha tenido un vertiginoso ascenso en el Gobierno desde su participación en las juventudes del Pacto Histórico. Ha ocupado cargos de alto nivel como asesora del Ministerio del Interior, jefe de gabinete de Presidencia y líder de agenda institucional, lo que ha generado debate sobre el acceso a altos cargos en el actual Gobierno. Por ahora, el caso está en manos de los órganos de control.
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