Rafael Ricardo Redondo Amarís, un adolescente de 15 años, quien sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en sus piernas tras la explosión de una vivienda en el barrio Las Flores del municipio de La Paz el pasado 13 de agosto, es la primera víctima fatal de ese hecho. La vivienda funcionaba como punto de venta de gas propano en pipetas, una actividad que, según las primeras investigaciones, se realizaba de manera ilegal.
El joven había sido trasladado a la Clínica Alta Complejidad, donde permanecía hospitalizado junto a su padre, Rafael Ricardo Redondo Verdugo, quien también resultó gravemente herido con quemaduras en el 70% de su cuerpo. En el mismo hecho, Juan José Toloza, de 17 años, vecino del sector, también sufrió quemaduras al encontrarse en el lugar durante el momento de la explosión.
El adolescente falleció este lunes, pero sigue la conmoción por lo ocurrido, especialmente en La Paz. Las autoridades informaron que la explosión ocurrió mientras las víctimas manipulaban combustible, transfiriéndolo de un cilindro a otro de forma artesanal. En el proceso, al momento de pesar el gas en una báscula, un cortocircuito desencadenó la explosión debido a la acumulación de gases inflamables.
Redondo Verdugo y Toloza continúan hospitalizados y bajo cuidado médico intensivo, mientras que las autoridades investigan las circunstancias que rodearon la venta y manipulación ilegal de gas en la vivienda.
