Este 14 de agosto, el corregimiento de Valencia de Jesús, tierra natal del legendario compositor y acordeonero Calixto Ochoa, se vistió de fiesta para conmemorar su natalicio número 90. Organizado por la Alcaldía de Valledupar a través de su Oficina de Cultura, el homenaje reunió a la comunidad local y visitantes en un emotivo tributo a una de las figuras más influyentes del folclor vallenato.
Calixto Ochoa, nacido el 14 de agosto de 1934, dejó un legado imborrable en la música colombiana. Reconocido por su talento innato, fue miembro de Los Corraleros de Majagual y de diversos conjuntos musicales que marcaron la historia del vallenato. En 1970, su virtuosismo fue premiado con la corona de Rey Vallenato en el Festival de la Leyenda Vallenata, un título que consolidó su lugar en la historia del folclor nacional.
Durante el evento, se llevó a cabo una muestra musical que incluyó algunas de las canciones más emblemáticas del maestro Ochoa, tales como ‘Los Sabanales’, ‘La Medallita’, ‘Charanga campesina’, ‘Remanga’, y ‘El Cantor de Valencia’. La jornada inició con una ofrenda floral en el cementerio del corregimiento, seguida por un recital en la plaza principal, donde se presentaron la banda de la Casa de la Cultura, el semillero de música vallenata de la Escuela Leonardo Gómez Jr., y el actual Rey Vallenato 2024, Jaime Luis Campillo.
El alcalde de Valledupar, Ernesto Orozco, destacó la relevancia de este homenaje: “Hoy rendimos tributo a un gran maestro del folclor, un acordeonero y compositor excepcional, cuya música ha trascendido fronteras y perdurará en el tiempo, no solo en el ámbito vallenato, sino en toda Colombia y el mundo.”
La Fundación Festival de la Leyenda Vallenata también se sumó a este significativo homenaje, reconociendo el impacto de Calixto Ochoa en la cultura vallenata. Por su parte, Jaime Luis Campillo, actual Rey Vallenato, expresó la influencia que Ochoa ha tenido en su carrera artística: “Las letras del maestro Calixto son la esencia misma de la música vallenata. Su legado ha sido fundamental en mi desarrollo como artista y como persona; crecí escuchando su música, que siempre ha sido una guía en mi camino.”
El evento no solo celebró la vida y obra de Calixto Ochoa, sino que también reafirmó el compromiso de la comunidad con la preservación del folclor vallenato, un patrimonio cultural que sigue vivo gracias a la memoria y el arte de sus más grandes exponentes.