La idea que pasa por la mente de varios deportistas en el Cesar parece llegar a la realidad de la judoca Adriana Castillo Utria, quién recientemente le entregó una medalla de oro, una de plata y otra de bronce a este departamento en los pasados Juegos Deportivos Nacionales.
¿La razón? Asegura ella, la falta de apoyo en estos tres meses que van del 2024 donde siente incertidumbre por muchas razones.
“Yo pensé que después de ganar medallas me tendrían más en cuenta, pero no ha sido así. Me desempeñaba como fisioterapeuta en Serdeportes y eso me permitía entrenar sin pensar en qué hacer para el sustento de mi familia, pero hace tres meses estoy sin apoyo. Ahora me hicieron una oferta laboral en Bucaramanga, tristemente me tengo que ir”, aseguró con tristeza la joven de 26 años.
Lo más lamentable es que la idea no sólo es de ella, “mi compañera también lo está pensando. Quiero alzar la voz porque no soy la única deportista que se ha ido, por favor no dejen ir a los talentos del Cesar que son pocos”, insistió.
Adriana Castillo Utria tiene 10 años practicando el judo dejando muchos reconocimientos al departamento del Cesar. Es fisioterapeuta y tiene una especialización de rehabilitación cardiopulmonar.
“Mi vida es el deporte, por eso no lo dejo. Yo me vine aquí con la creencia que me iban a apoyar, me ilusionaron. Estoy aquí por el profesor Dodanim Barbosa. Pensé que este año era de ganancias, de metas, de giras nacionales e internacionales, pero eso creo que no se va a dar”, concluyó la deportista oriunda de Valledupar.
