por William Rosado Rincones
De los simpáticos personajes de esta región era de muy buena referencia Ardenago Roa Narváez por cuyo nombre casi nadie lo conocía, ese nombre de pila quedó sepultado ante el académico apodo de: ‘El Abogado’, así lo llamaban desde niño, una figura de la vallenatía, por su modo de ser y las ricas anécdotas que sembró en la región.
Una malformación genética lo diferenciaba de una persona normal físicamente, pero esto nunca fue óbice para vivir feliz, era dicharachero, risueño, bailador y amante de la bohemia, de lo que se había retirado, luego de que los tragos lo estaban volviendo peleador, lo que le costó incluso, un sofoco con los ‘paracos’ en aquella época del conflicto armado.
‘El Abogado’ se fue al tribunal divino, una enfermedad que lo redujo a cama durante un mes se lo llevó al más allá, dejando dolor entre sus familiares y un rico anecdotario de su singular existencia en la que se destacó por su amor al trabajo especialmente en la mensajería.
Era natural de Caracolí con ascendencia también en Los Venados, murió ayer a la edad de 58 años de edad en el Hospital Rosario Pumarejo, en donde estaba internado gracias a la benevolencia de su hermano Bladines Roa Narváez, quien es médico en ese centro asistencial.
Las honras fúnebres del “abogado de Caracoli” se cumplirán este jueves 23 de enero a las 9 de la mañana en Jardines de Recordar y su velación en la Funeraria Recordar.
