Así como ha ocurrido en los últimos dos años en ciudades del mundo como Santiago, en Chile; Distrito Federal, en México; Madrid, España; y Buenos aires, Argentina; en Valledupar un grupo de activistas sociales y feministas también decidieron poner el pecho pa exigir que frenen los abusos hacia la mujer y se les respete como agentes de cambio y liderazgo.
Se quitaron la blusa y sus sostenes para dejar libres sus senos, quieren que las mujeres tengan libertad de vivir sin que sean agredidas física ni verbalmente. El grupo de activistas marcharon desde la Gobernación del Cesar hasta el comando de la Policía seccional Cesar, en el barrio 12 de Octubre, donde hicieron un plantón y algunas de ellas dejaron su torso al descubierto.
Esta marcha se originó por varias razones, entre ellas, por el suicidio de una adolescente de 17 años en Popayán, que horas antes había denunciado que cuatro policías abusaron sexualmente de ella en una URI de la Fiscalía.
“No podemos dejar que sea normal cómo las mujeres son agredidas. Lo de los senos es una muestra simbólica de decir: ‘este cuerpo es mío, el hecho de que yo muestre o no muestre, no te da el derecho a tocarme, no te da el derecho a agredirme’; y lo que vemos nosotros es que desde las institucionalidad esto se quiere ver como unos simples hechos aislados, se está convirtiendo en una práctica institucional”, manifestó Taís Ruiz, quien participó en la jornada.
Ruiz indicó que están cansados del maltrato hacia ellas y que no cesarán las protestas ante las violaciones de derechos humanos. “No se trata solo el caso de la adolescente. Seguiremos marchando, en la medida que tengamos que seguir visibilizando todas estas agresiones de las que estamos siendo víctimas las mujeres”, agregó.
