El grupo de vigilancia epidemiológica del departamento del Cesar visitó por segunda vez la zona indígena Yukpa, ubicada en la vereda El Once, zona rural del municipio de Codazzi, con el propósito de continuar las acciones de contención de la COVID-19, iniciadas a principios del mes de mayo tras la confirmación de un caso positivo en un niño de seis meses, miembro de esta comunidad, quien por fortuna ya se encuentra completamente recuperado del coronavirus.
Durante la primera visita al asentamiento Akacha, la cual realizó un equipo interdisciplinario de profesionales de la salud integrado por epidemiólogos de la Secretaría de Salud Departamental y personal médico de Dusakawi EPS y Dusakawi IPS, se tomaron 30 muestras a miembros de las 17 familias que integran dicha comunidad, de las cuales, dos resultaron positivas, lo que motivó la realización de una segunda visita a campo, con el fin de tomarle muestras al resto de los miembros del asentamiento Akacha, y también a los habitantes de un asentamiento cercano, denominado Sariyáz, de donde procede uno de los casos confirmados.
Para esta segunda investigación en campo, la cual duró dos días, estuvieron en la zona epidemiólogos, tomadores de muestras, bacteriólogos, fisioterapeutas y auxiliares bilingües. En total, se tomaron 132 muestras: 53 en Akacha y 79 en Sariyáz, con lo que se hizo muestreo al total de la población de esos asentamientos, con el fin de evitar la propagación de la COVID-19 en ese territorio.
De acuerdo con la información suministrada por el Secretario de Salud Departamental, Hernán Baquero Rodríguez, el equipo de campo informó que encontraron cerca 20 niños con sintomatología respiratoria leve, que sugiere una gripa común; sin embargo, a todos se les tomaron muestras para descartar o confirmar una posible presencia del virus en otros miembros de la etnia Yukpa. Estas 132 muestras son procesadas con prioridad por el Laboratorio de Salud Pública del departamento.
Tal como se hizo durante la primera visita, el Gobierno Departamental entregó mascarillas quirúrgicas para la protección de ambas comunidades; con la autoridad indígena del territorio se establecieron unas medidas para que la comunidad cumpla con el aislamiento personal, y se está revisando si se implementa un cierre de los caminos, para evitar que campesinos de la zona y la comunidad indígena entren y salgan del territorio, mientras se establece el cerco epidemiológico.
